sábado, 20 de agosto de 2011

Arte y Naturaleza

Una belleza de la Naturaleza es una cosa bella; la belleza artística es una bella representación de una cosa.
(Kant, Crítica del juicio)

Para Kant, el arte no es Naturaleza, la cual crea todos los objetos (desde la piedra hasta el ser humano) de acuerdo con principios libres y no regulables por ningún elemento ajeno a ella. Ni tampoco es ciencia, cuya tarea esencial consiste en imponer reglas, leyes y teorías, con el fin de conocer la realidad.
El arte no es tan libre como la Naturaleza, aunque pretende, por encima de todo, esa libertad; ni tampoco está sometido a reglas como la ciencia, sino que consiste en una especial actividad gracias a la cual el ser humano "libremente" (pero también conforme a unas reglas y habilidades) crea objetos bellos, cuya realización lleva consigo una especial satisfacción en el sujeto y cuya contemplación debe producir un sentimiento de placer en el contremplador estético.
El arte bello se distingue del arte mecánico y de las artes de lo agradable. El arte mecánico es aquel en el que el sujeto lo único que hace es aplicar una serie de normas para crear objetos, lo cual requiere un conocimiento previo de lo que debe ser el objeto. Ése es el caso del carpintero que fabrica una mesa o una silla, o del herrero que fabrica una herradura. Por su parte, las artes de lo agradable son aquellas que tienen como fin el goce de vestir bien, el arte de saber llevar una conversación, el arte de la decoración, de la jardinería, etc.
Frente a éstos, el arte bello consiste en la creación libre y desinteresada de un objeto sin conocimiento previo alguno de lo que se deba saber de ese objeto, utilizando para ello la imaginación, el gusto y una cierta habilidad, siempre necesaria en todo artista para poder plasmar sus ideas en la obra de arte.
Kant insiste en algo que va a tener muy en cuenta la Estética posterior: los productos artísticos tienen que estar hechos tan libres de sujecciones a regla alguna que puedan parecer objetos de la Naturaleza. El arte debe imitar la Naturaleza del mismo modo que la Naturaleza, en algunos de sus objetos (por ejemplo, el caracol, algunas hojas de múltiples lóbulos, algunos patos que parecen de porcelana...), parece imitar el arte.



Nenúfares de Monet
La Naturaleza era bella cuando al mismo tiempo parecía ser arte, y el arte no puede llamarse
bello más que cuando, teniendo nosotros conciencia de que es arte, sin embargo parece Naturaleza.
Kant, Crítica del juicio


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