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jueves, 6 de mayo de 2021

Controversias generales entre conducta y motivación

El problema de la conceptualización de la motivación está muy relacionado con otros muchos aspectos del estudio de la conducta propiamente dicha. Veremos a continuación diferentes tópicos que nos llevan a generalidades que inciden en el problema de la motivación:

1. Acentuación en la conducta del proceso innato y del adquirido: Una controversia duradera se refiere al grado en que pueden atribuirse los rasgos de la conducta a las experiencias de un organismo después del nacimiento, o las características presentes en el momento del nacimiento o que, estando presentes en potencia, crezcan en el proceso de maduración o del desarrollo. Este tópico de la naturaleza-crianza surge en el caso de ciertas conductas específicas, como aparearse y en las actividades maternales. También está presente en el juicio general de si es la naturaleza o la crianza el determinante más importante del conjunto de características del animal humano. Las investigaciones han demostrado que el problema naturaleza-crianza es complejo, y que existen intrincadas interrelaciones entre la estimulación ambiental y el desarrollo de las potencialidades conductuales. Estas pruebas se examinarán cuidadosamente, para ver el papel que dichos factores tienen en varias conductas específicas. Sin embargo, creemos que es una empresa estéril intentar estimar las contribuciones relativas que la naturaleza y la crianza aportaron a la suma de características de cualquier animal.

2. Los factores conscientes y los inconscientes en la conducta: Han habido grandes discusiones sobre el lugar que los procesos de que estamos conscientes y de los procesos de que estamos inconscientes ocupan para determinar lo que sentimos, hacemos y pensamos. Parte de esta controversia resulta de haber definido en forma inadecuada términos y de atribuir fácilmente una existencia sustancial a tendencias conscientes e inconscientes. Esto último se ejemplifica con frases como "lo inconsciente" o "lo consciente". Para nosotros es evidente que los procesos conductuales pueden describirse como conscientes o como inconscientes o, con mayor propiedad, según su grado de disponibilidad a la conciencia o al recuerdo consciente; pero que "conciencia" o "lo inconsciente" no son entidades útiles. Más importante es el punto de que gran parte de lo que se quiere decir con la palabra "consciente" lo indica con mayor legitimidad la frase "comunicado verbalmente", y mucho de lo que quiere decirse con la palabra "inconsciente" queda más claro con la frase "no comunicable verbalmente". De hecho, los términos "comunicable" e "incomunicable" reflejan dimensiones de las distinciones anteriores que tienen un significado aún mayor para el problema implicado. En otras palabras, el problema real de la conciencia lo constituye el grado en que el material es comunicable (o las condiciones en que es comunicable), más bien que si se le comunica o no (o cuánto de él se ha comunicado).

3. La conducta, ¿es primaria o instrumental?: Cuando consideramos que la conducta es primaria, la describimos e intentamos descubrir de qué condiciones es función y, quizá, qué consecuencias tiene. Pero no es necesario buscar qué funciones tiene la conducta, hasta dónde se relaciona con el bienestar y la economía del organismo. Cuando se hace esto último, se tiende a ver la conducta menos como es y más como sirve al organismo; es decir, ¿cuál es su valor instrumental?
Este tópico, a diferencia de los dos anteriores, no es idóneo, es principio, para tomar una decisión, sea por medio de una cuidadosa definición de los términos o un cuidadoso estudio de la conducta en sí y de las condiciones en que se efectúa. Se parece más a una actitud o a una orientación, en cuyos términos se examina un fenómeno. Se ha procurado ver a la conducta desde ambos lados de este tópico, y se ha intentado subrayar, por lo menos, algunas de las consecuencias de apoyar cualquiera de estos puntos de vista.

4. El funcionamiento orgánico, ¿es conservativo o está orientado al crecimiento?: Este tópico está íntimamente relacionado con el anterior y con el siguiente. La conducta del organismo, ¿sirve en primer lugar para mantener un estado constante de equilibrio; es decir, está homeostáticamente organizada y es conservativa? O, alternativamente, ¿sirve la conducta del organismo para llevarlo a nuevos niveles de desarrollo, desenvolviendo potencialidades que un principio conservador no podría abarcar? A menudo se considera que el crecimiento o, como a veces se le llama, la actualización del potencial, se opone al equilibrio homeostático o a su conservación.
Una vez más creemos que éstas son, en esencia, diferencias de actitud. Es difícil encontrar un criterio que pudiera resolver dichas diferencias.

5. Disposición de la naturaleza humana: Ésta es una cuestión fundamental para quienes se interesan en la motivación. ¿Es el hombre, libre y no contaminado por las experiencias y restricciones de la sociedad, esencialmente bueno, altruísta, fraternal, creador y amante de la paz? ¿O, alternativamente, es por esencia malo, egocéntrico, agresivo, competidor, guerrero, y necesita de las restricciones de la sociedad para evitar que se destruya a sí mismo y destruya a sus semejantes?
Creemos que no deberían hacerse suposiciones anticipadas al respecto. En lugar de ello, deberían considerarse las circunstancias de la vida pasada y la presente como fuentes de la "naturaleza humana" del hombre. Al así hacerlo, es obvio que concordamos con quienes acentúan la crianza y no con los que acentúan la naturaleza original.

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