Cada ser humano es como los demás seres humanos, como algunos otros seres humanos y como ningún ser humano.
@blog_trca

martes, 13 de noviembre de 2018

Una nueva estructura para el Sistema Solar

En agosto de 2006, la Unión Astronómica Internacional (UAI) aprobó una nueva definición de planeta. Como resultado de ella, el sistema solar pasó a tener sólo ocho planetas.
Después de pasar décadas buscando el décimo planeta, los hallazgos de nuevos cuerpos celestes, paradójicamente, hicieron insostenible la consideración de Plutón como planeta. En efecto, más allá de la órbita de Neptuno, en un anillo denominado cinturónde Kuiper, se han ido encontrando cientos de cuerpos helados, entre ellos algunos de gran tamaño. Pero el detonante fue el hallazgo de Eris (antes llamado Xena) en el año 2003 con un tamaño mayor que el de Plutón. Si se mantenía a Plutón entre los planetas había que integrar a Eris, a decenas de cuerpos del cinturón de Kuiper e incluso a Ceres, el mayor de los asteroides.
La nueva definición de planeta quedó así: cuerpo que orbita en torno a una estrella, cuya masa es lo suficientemente grande como para tener forma casi esférica y haber despejado los alrededores de su órbita. Como se puede ver, nada se dice del tamaño mínimo que debe tener sino que se incorporan dos características:
  • Su masa debe ser suficiente para que su forma sea casi esférica. Los asteroides de menor tamaño tienen formas irregulares; sólo a partir de determinada dimensión y masa, la gravedad es capaz de vencer su rigidez y adoptar una forma esférica.
  • Debe haber despejado su órbita. Este criterio incorpora los conocimientos actuales sobre la formación de los planetas. La formación de los planeta sigue un proceso en el que pequeñas partículas se unieron formando otras mayores con un crecimiento tipo "bola de nieve". Cuando una de ellas adquirió un tamaño suficiente fue barriendo su órbita. Así, cada planeta domina su zona orbital.
Los cuerpos celestes que, como Plutón, cumplen la primera condición pero no la segunda han pasado a denominarse planetas enanos.

1. Una historia de altas y bajas
Plutón no ha sido el primer cuerpo celeste que perdió su condición de planeta. La historia de la astronomía, y con ella nuestras ideas sobre la estructura del sistema solar, viene marcada por el listado de planetas. Así, para el sistema geocéntrico los planetas eran Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno, pero también la Luna y el Sol, aunque no la Tierra.

Modelo geocéntrico, anterior a 1543
La siguiente tabla recoge las altas y las bajas en el listado de planetas, así como el año en que ocurrieron:


2. Composición del sistema solar
Tras los últimos cambios introducidos por la UAI, el sistema solar está compuesto por:
  • El Sol: Es la estrella de nuestro sistema planetario. Tiene un tamaño medio entre las estrellas; aun así, en su interior cabrían un millón de planetas como la Tierra. Es una esfera de gases incandescentes (fundamentalmente hidrógeno y helio). Debe su energía a las reacciones termonucleares que se producen en su núcleo, en donde alcanza una temperatura de 15 millones de grados centígrados, mientras que en su superficie es de 6000 ºC. El Sol gira en torno a su eje.
  • Planetas: Son cuerpos celestes que orbitan alrededor del Sol, cuyas masas son lo suficientemente grandes para tener forma casi esférica y haber despejado los alrededores de su órbita. De acuerdo con sus características y posición se diferencia entre:
a) Planetas interiores o terrestres: Incluyen Mercurio, Venus, la Tierra y Marte. Son los planetas que se encuentran más cercanos al Sol, tienen un tamaño pequeño, su superficie es rocosa y tienen una atmósfera gaseosa poco extensa o inexistente.
b) Planetas exteriores o gigantes: Aquí se incluyen Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno. Son los planetas que se encuentran más alejados del Sol, tienen un tamaño grande, sus superficies no son rocosas y se encuentran fundamentalmente en estado gaseoso y líquido.
  • Planetas enanos: Son cuerpos celestes que orbitan alrededor del Sol y tienen una masa lo suficientemente grande para adoptar una forma casi esférica pero no para haber barrido su órbita. Aquí se incluyen Ceres, Plutón, Eris y, seguramente, varias decenas de cuerpos celestes situados más allá de la órbita de Neptuno.
  • Satélites: Son cuerpos celestes que giran en torno a los planetas. La Luna es el satélite de la Tierra. Exceptuando Mercurio y Venus, todos los planetas tienen satélites. En torno a Júpiter se han encontrado ya 63 satélites, en torno a Saturno 60, y la lista no deja de aumentar.
  • Cuerpos menores del sistema solar: Según la UAI son todos los cuerpos celestes que orbitan en torno al Sol y que no son planetas, ni planetas enanos ni satélites. Fundamentalmente incluye:
a) Asteroides: Son cuerpos rocosos menores, generalmente de forma irregular. La mayoría se encuentra en el cinturón de asteroides, entre Marte y Júpiter. Otros grupos importantes son los troyanos, situados en la órbita de Júpiter, y los centauros, en la órbita de Saturno.
b) Cometas: Son pequeños cuerpos celestes, orbitan más allá de Neptuno, en el cinturón de Kuiper. Están constituidos por hielo y partículas de polvo; es frecuente denominarlos "bolas de nieve sucia".

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario